Letra de El Girasoles (2007-2017)
Susurra en voz baja los planes en proceso,
manteniendo a su familia alejada, con recelo.
Ignorantes de una vida como incógnito...
Si guarda y vigila su pasado en una caja
Pasar inadvertido es su único propósito:
el crimen de alta escuela y el silencio son sinónimos.
El perfil de la persona que yo marco
no juega con las drogas, se las folla como un narco.
Nunca en su vida le apuntaron con un arma;
fijó el cañón en nucas y se cobró mil almas…
Con todo esto tampoco perdió la calma:
mil bocazas, hoy en día, son el pasto de las larvas.
La mudez en ciertos campos, uno de sus pilares.
¿Y un dilema en su existencia? Dos sistemas judiciales.
Sin seguir los rituales…
...borraba de sus yemas sus huellas dactilares.
Hace camino en solitario, sabiendo que el triunfo
y el fracaso son unos impostores…
Sin creerse el rey del patio,
los chicos de su barrio le apodaron como “El Girasoles”.
[Estribillo]
El Girasoles viene y va de día,
viene y va de noche, ¡no teme a la Policía!
Tiene claro que no existe, pero resiste,
y mantiene siempre su sangre fría.
El Girasoles viene y va de día,
viene y va de noche, ¡no teme a la Policía!
En la cartera lleva apuntado el nombre
del único enemigo que conocía.
Perfección es el sello que marca todos sus golpes,
cumplió las reglas del juego y rompió los moldes.
Sus impecables trabajos y trayectoria
se reflejan en sus acciones, sin planes de escapatoria.
Está en la senda sombría de un asesino serial
que piensa, andando en las vías, en su historial criminal.
Su asesora social de joven le dijo:
(“Serás una leyenda mientras prosigas vivo, hijo”).
Su acto de fe no lo basó en la amnistía,
los delincuentes, por miedo, le concedieron indultos…
Estaba en el punto de mira, darle sería otro asunto,
si es una sombra esfumable en una fracción de segundo
Un traidor moribundo pide clemencia,
a él no le tiembla el pulso y dicta sentencia:
le hará difunto de sus hijos, confusos,
testigos de lujo de su presunta inocencia.
Escribe en un viejo diario,
sabiendo que el vigor y la fortuna son unos desertores…
Sin creerse un hombre sabio,
los labios de sicarios le apodaron como “El Girasoles”.
[Estribillo]
El Girasoles viene y va de día,
viene y va de noche, ¡no teme a la Policía!
Tiene claro que no existe, pero resiste,
y mantiene siempre su sangre fría.
El Girasoles viene y va de día,
viene y va de noche, ¡no teme a la Policía!
En la cartera lleva apuntado el nombre
del único enemigo que conocía.
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