Giane Kaneda - Si se pierde el equilibrio (Bonus Track)

Producido por: Giane Kaneda

Letra de Si se pierde el equilibrio (Bonus Track)

Tengo pesadillas,
me atormentan cada noche y no se rezar, me da pereza comenzar,
un dia nuevo así, con miedo y con frenesí.
Tejido rojo carmesí cubre mi prótesis.
Me llaman el cojo de Tennessee, entre parentesis,
perdí la pierna en accidente contra un taxi,
mi cuerpo bajo el chasis, no lo cuento casi,
los sedantes en la sangre me sentaron como el éxtasis.
Y en el presente vivo en un infierno,
hubiera preferido sin dudarlo haberme muerto,
o ser un tuerto, por lo menos puede ver,
yo sin pierna no puedo correr, sólo es un recuerdo.
No salgo del cuarto, ¿para qué?,
para ver, comparar, mi dolor, con la gente alrededor.
Es un castigo, tio, como un castillo inexpugnable
que quiero trepar y no lo consigo.

[Estribillo]

Uno, dos, equilibrio que se rompe,
Tres, cuatro, esperanza que se quiebra,
cinco, seis, siete, se me aparta del reparto de la tarta,
me deprimo cuando escribo cada carta
si describo mi dolor, no tengo valor,
desesperacion y lloriqueos.
Esta es la parábola, tienes que colaborar,
para pillar la moraleja de la suerte ya.

Encerrado de la desgracia de mi vida,
no creo en la magia y por eso que nada va a cambiar.
Cada dia igual,
considero que la suerte es una puta sin conciencia de moral ambigua.
Ya paso del agua y solo bebo Vodka,
oculto del gentio, no quiero que nadie me conozca,
pongo verjas. No tengo ni pizca de amor propio,
sin decir ni pío, enganchado al opio.
Vivo cerca de veras, me verás en la sala de espera,
esperando una esperanza que jamas vendra.
No pago prenda, pago el internet,
porque busco una mujer que por lo menos me comprenda.
De chat en chat durante todo un año,
al final encuentro mi objetivo sin hacerme daño,
de nombre Melisa me pasa su foto
y ya no puedo ser yo mismo "enamorao" de su sonrisa.

[Estribillo]

Uno, dos, equilibrio que se rompe,
Tres, cuatro, esperanza que se quiebra,
cinco, seis, siete, se me aparta del reparto de la tarta,
me deprimo cuando escribo cada carta
si describo mi dolor, no tengo valor,
desesperacion y lloriqueos.
Esta es la parábola, tienes que colaborar,
para pillar la moraleja de la suerte ya.

A pasado tiempo desde entonces,
ya nos conocemos mejor, este amor es como un trance.
Lo tengo al alcance y soy correspondido,
quiero que esto avance y le lanzo cumplidos.
Llego el momento de la verdad,
quiere conocerme cara a cara, ¿aceptará mi discapacidad?,
habra que ver, quedamos en un cafe,
quiero a esa mujer, vivir juntos, un futuro amanecer.
Pero al verme aparecer todo se jode,
observa mi cojera y dice que no va a poder.
Llora, me besa, se aleja de la mesa,
me deja la princesa que me prometio querer.
Mierda, Melisa es una cerda,
que nadie se sorprenda cuando la cordura pierda...
Cojo un cuchillo, miro y asesino
a todo tipo alrededor de este dolor y me suicido.