Letra de Billetes verdes
Crecimos tanto que ahora todo nos separa
perdimos fe en promesas que hoy no valen nada.
Subimos la escalera, aunque el suelo resbala
tratando de llegar arriba sin mover las alas.
Con el sudor de los que luchan
y la ventaja del que atiende cuando escucha.
Con la puerta abierta por si alguien me llama
con la capucha puesta por si me señalan.
Evito estar en el centro de la diana siempre
pues esos que disparan simplemente se divierten.
Sus sueños se han marchado y viven en el presente
primero tiran sin pensar, luego se arrepienten, ¡bah!
Todo esto me da pena
estoy tratando de escapar lejos de la escena ahí fuera.
De este circo de pocos beneficios
que resulta siempre van, al mismo bolsillo, y nada.
De lo que digas vale, de lo que harán se sabe,
de lo que ellos te quiten con leyes inmorales.
Me tiene sin cuidado, llevadme a tribunales
si quieren más motivos solo miren pa’ la calle.
Donde unos pasan hambre, y otros tras los alambres
saltan la valla en busca, de miel en otro enjambre.
Donde unos ganan y el resto de ellos pierde
donde se reza a un Dios con billetes verdes.
Yo quiero huir de todo y ser como una sombra
flotar en medio de mi cuarto, preso de las ondas.
No responder, y olvidar todas las preguntas
que en forma de fantasmas en mis sueños se presentan.
Tomo de ese líquido, bebo de la pócima
logro ver más nítido pero todo sigue igual.
No encuentro diferencia entre bien y mal
y noto que alguien siempre observa tras el cristal.
Los veo como traman planes desde el reservado
al fondo de un caro burdel a cuenta del estado.
Botellas de champan y putas van de mano en mano
la coca se la “snifff” mientras vuelcan otro gramo
Así nos va, bro, todos lo permiten
controlan a las masas como a niño con el Twitter.
Creen que solo somos cifras que se repiten
aquellos a los que reprimen pa que no griten, pero
Los que llevan el peso de avances sin progreso
de muros en exceso, y ratas sobre el queso.
Los que lo tienen crudo pa salvar su futuro
son esos que andan ahí fuera sin un puto duro
Aquellos que les toca vivir la vida loca
sacrificar lo suyo, para llenar la boca.
De los que están esperando y tienen hambre
pero que saben que es difícil que algo cambie.
