Letra de Nerviozzo - Cazador de almas perdidas
Miro a mi lado y veo al pobre diablo de hoy maniatado,
desorientado y aterrorizado,
con marcas de llevar horas llorando,
preguntándose porqué cojones le ha tocado.
Me encantaría decirle que cierre el pico
pero es mejor ni hablarles porque se suelen poner histéricos,
que nadie te odia, chico,
pero te has convertido en carne para estos cuatro niños ricos.
Soy un cazador de almas perdidas,
el que alimenta sus pervertidas mentes podridas,
antes lloraba por hacer el trabajo
y ahora sólo cojo el fajo y me largo.
Y no hay odio ni excusas ni pretextos
porque nunca nadie me obligó a nada de esto,
empecé como todos, por deudas, por dinero
pero hoy ya no me hace falta y sigo haciéndolo.
[Estribillo](x2)
Soy un cazador de almas perdidas
con un corazón forjado en las Termópilas,
y no soy el verdugo, es cierto, pero ayudo
a que conozcas el infierno más chungo del mundo.
Y duermo por las noches como un niño
aunque a veces me despierto empapado en sudor porque en mi sueño
estoy amordazado y atado, en el suelo
y también estoy de pie ofreciéndome un pañuelo.
Pero hace años que dejé de torturarme
y abandoné la compasión por estos trozos de carne.
Yo no soy el monstruo que creéis,
soy el monstruo que creáis cuando no hacéis lo que debéis.
Hace tiempo comprendí que este es mi destino
y que no pienso huir de él, no soy un asesino,
me lo tomé como una oportunidad
para ayudar al karma a dejar limpia esta ciudad de mierdas.
Entonces vi claro cuál es el propósito,
cómo arrojar luz a la oscuridad de este pozo psicótico,
y ya que tenía que elegir víctimas
da igual inocentes o conflictivas, ¡qué idea tan magnífica!
Pederastas, violadores, reincidentes,
amas de casa, obreros, delincuentes,
me valía cualquier hijo de puta sin lástima,
capaz de hacer llorar a cualquiera sin soltar ni una lágrima.
Yo ya hice mi elección e iré al infierno
pero me llevo conmigo a unos cuantos cientos,
y seguro que arderé por esto
y que algún día pagaré por mis pecados y lo haré sonriendo.
[Estribillo](x2)
Soy un cazador de almas perdidas
con un corazón forjado en las Termópilas,
y no soy el verdugo, es cierto, pero ayudo
a que conozcas el infierno más chungo del mundo.
